El jacquard es una tela lisa con un tacto suave que puede ser de seda o satén.
El tipo de tejido jacquard lo convierte en un tejido duradero con resistencia a la abrasión y resistencia a las arrugas. Dado que la posición del hilo hace que la tela sea más compleja y duradera, proporciona una mayor durabilidad.
En la tela jacquard, el patrón no está impreso ni bordado, sino que se teje directamente en la tela debido al sistema de telar jacquard que vimos anteriormente. Por tanto, a través del jacquard, se pueden conseguir patrones y dibujos muy complejos.
Características de la Tela Jacquard
♦ Es una tela lisa, suave al tacto.
♦ La tela es un poco más pesada y compleja que otras telas.
♦ Casi siempre se utiliza para producir prendas con patrones complejos.
♦ Tiende a tener brillo y contraste en la pintura.
♦ Puede tener tela de seda o satén.
♦ Tejido duradero con resistencia a la abrasión y resistencia a las arrugas.
♦ Su limpieza puede resultar más complicada que la de otros tejidos.
¿Cuándo y Dónde Usarlo?
Aunque el jacquard puede replicar cualquier tipo de tejido en la actualidad, creemos que el jacquard es un tejido que se usa para hacer tapizados de asientos de alta resistencia, con una apariencia, textura y patrón obvios fuertes.
Este tejido es el resultado de múltiples posibilidades de tejido, que pueden realizar la introducción de hilos en diferentes direcciones y en diferentes direcciones. De ahí su calidad y resistencia.
La tela Jacquard se puede aplicar en diferentes tipos de confecciones y dependiendo del uso, existen diferentes tipos y diseños.
Desde el punto de vista funcional, los hilos se desgastan y se desprenden, lo mejor es evitar frotar en las zonas de uso frecuente cuando se utilizan muebles tapizados.
El jacquard es muy adecuado para cortinas, almohadas, cabeceros o decoración de paredes.
El jacquard de seda natural tendrá una calidad excelente, será elegante y refinado, pero más refinado, y puede que no se recomiende para decorar muebles de uso frecuente.
Limpieza y Cuidado de la Tela Jacquard
El jacquard es una tela duradera que debe limpiarse en seco como la mayoría de los tapizados, aunque también depende de la composición y adherencia de sus fibras.
Actualmente, el mundo del tejido ha recorrido un largo camino, y hemos comenzado a buscar telas jacquard lavables. No obstante, te recomendamos que siempre tengas mucho cuidado y precaución, si quieres mojar la tela, asegúrate de lavarla con agua fría.
Si vas a hacer cortinas, cojines o cualquier cosa que quieras hacer con este tipo de tela, también es una buena técnica, primero mojando la tela, porque las fibras naturales encogerán.